viernes, 11 de mayo de 2018

Primeros Auxilios en el Deporte


Hoy en día, son muchas las personas que se están dedicando a la actividad física por múltiples razone, algunas tras conseguir escapar de la situación económica en la que viven y en otro extremo, aquellas personas que solo lo realizan por que les gusta o por mantenerse en salud.
Pero lo cierto es, que no importando la razón por la que realice ejercicios, todos estamos expuestos a sufrir lesiones de diferentes tipos, como puede ser un simple rasguño, así como a lesiones más severas como pueden ser fracturas o heridas de diferente índole.
Lo más terrible del caso, es que en la mayoría de las ocasiones en las que suceden estas lesiones, no encontramos un personal calificado para atender las misma, porque lo cierto es que, aunque en los últimos días, se está tomando más en cuenta el personal de salud en lo relativo a su participación en eventos deportivos, no todos los grupos que realizan actividad física regular u ocasional, tienen una persona con los conocimientos mínimos necesarios para atender las eventualidades más frecuentes presentados por la actividad misma desarrollada.
Es por esto aconsejable, que toda persona tengo conocimientos en primeros auxilios, en especial a las que se dedican a realizar actividades que lleven su cuerpo mas allá de los demás y sobre todo, a los que se dedican a llevar los cuerpos de otros hasta la fatiga, como es el caso de los entrenadores, ya sean estos de equipos o personales.
Que entendemos por primeros auxilios. Son las primeras atenciones que recibe una persona, después de haber sufrido un evento adverso, relacionado en especial con su salud, ya sea física o mental.
Vale resaltar, que estas primeras atenciones, son cruciales para determinar el pronóstico de la mayoría de las lesiones que podamos sufrir, pues según sean oportunas, eficientes y eficaces, garantizaran la más pronta y correcta rehabilitación de la misma.
En la actividad física, las lesiones más frecuentes que podamos encontrar, son las relacionadas al sistema musculo-esquelético, las cuales pueden ir desde una simple forzadura muscular, esguinces, torceduras, desgarros, luxaciones, hasta fracturas de todo tipo.
En estos casos, es importante, además de hacer una adecuada diferenciación de la misma, no tratar de movilizar la lesión, pues aunque es lo más característico de las misma, la perdida de la movilidad, esto puede causar un agravamiento de ella, en mucho de los casos. El tratamiento que más se puede aconsejar es, además de la inmovilización, hasta que un facultativo lo evalúe, es la aplicación de hielo, el cual, va a ayudar a disminuir el edema característico de este tipo de lesiones, así como también disminuir el dolor. En muchos casos este solo tratamiento puede reducir el problema, pudiendo la persona incluso continuar con su actividad, en los que no, les ayudara. Solo en los casos de hemorragias, no se aconseja, pues el tratamiento principal es la detención de la misma, y en el caso de las fracturas, no hacer presión a la hora de aplicarlo.
Otra complicación que se ha presentado cada vez más frecuente, sobre todo en los deportes de alto rendimiento, es la muerte súbita en el deporte, todavía no explicada con claridad su causa, en muchos casos relacionadas con trastornos de conducción eléctrica del musculo cardiaco, el conocimiento de la reanimación cardio-pulmonar, puede ayudar, en el entendido de que esta es la causa del problema.
Es bueno recordar, que la posibilidad de lesión existe en cualquier deporte, no importa lo simple o inofensivo que este parezca, desde el ajedrez, hasta el futbol o boxeo, considerando estos dos, los más lesivos.
En conclusión, todos debemos saber primeros auxilios y en especial, primeros auxilios aplicados al deporte, con una especial atención a las lesiones que se pueden presentar en los deportes que practicamos, con el fin de garantizar la perpetuidad en el tiempo de nuestros atletas.

EL ENTRENADOR PERSONAL

Hoy en día se ha estado poniendo de moda, la realización de ejercicios por diferentes causas; algunos lo hacen simplemente por el hecho de que está de moda, otros para verse mejor, perder peso, salud, etc. Pero lo cierto es que todos y cada uno de las personas que hacen ejercicios, con diferentes objetivos, pero que además de ello, son personas totalmente diferentes, más gordos, más delgados, mas altos, más pequeños, hombres, mujeres, sea como sean, somos todos diferentes, pero todos hacemos lo mismo a la hora de realizar ejercicios.
Y si a esto le sumamos los patrones de alimentación que cada uno de nosotros llevamos, la diferencia se marca mucho mas, pero todo esto, todos lo sabemos, pero aun a pesar de ello, seguimos haciendo lo mismo que los demás, y esperamos resultados idóneos para nosotros, para cada uno.
Y si seguimos marcando las diferencias que existen entre cada persona, todas ellas importantes a la hora de la planificación de un programa de ejercicios, la lista sería enorme. Entonces me pregunto, ¿Es posible que siendo cada uno de nosotros tan diferentes, haciendo lo mismo cada uno de nosotros, recibamos los mismos resultados? Correcto, como han pensado la respuesta es NO.
Le pondré un ejemplo, imaginemos que tenemos dos cubos llenos de agua, por decir algo, uno con capacidad de 2 galones y otro con capacidad de 20 galones, si a cada cubo le sacamos la misma cantidad, diríamos un galón de agua, el resultado sería el mismo, pues claro que no, el primero quedaría por la mitad, mientras que el otro apenas se notaria que se le saco algo. Así mismo pasa cuando a dos personas diferentes le aplicamos el mismo ejercicio, y eso lo vemos a diario, por eso vemos que algunas personas tienen resultados con un entrenamiento y otros no, es porque cada quien es diferente y requiere un tratamiento diferente.
Tenemos que comenzar a ver el ejercicio como un medicamento, que para conseguir los resultados deseados, tenemos que dosificarlo acorde a los requerimientos propios de cada individuo, y es aquí donde entra un personal calificado, con los conocimientos necesarios para poder hacer esta dosificación acorde a las necesidades de cada individuo, esto tienen que ser un plan, progresivo y detallado. Cuando hablamos de plan, nos referimos a planificación, no a la improvisación. Un entrenador personal tiene dar a conocer a su cliente el plan de por lo menos un mes de anticipación, donde se esperan resultados, y para saber si se obtienen hay que hacer evaluaciones previas, siempre tomando en cuenta los objetivos del cliente, pero siempre procurando la salud del mismo, con seguridad.
El entrenador personal es un profesional de la actividad fisca, el cual su función primordial es lograr que el cliente logre sus metas, dentro de un marco de seguridad, con la capacidad de manejar cualquier inconveniente que se le presente durante la realización de los ejercicios.
Lo primero que hace el entrenador personal, es una evaluación del cliente, para determinar las condiciones del mismo a la hora de iniciar un programa de acondicionamiento físico, así como también determinar las limitaciones que presente, tanta desde el punto de vista motriz, así como del punto de vista de salud, debe tener la capacidad de adaptar el plan según se desarrolle el programa, según avance el cliente, según el lugar, ya sea en la casa o en un gimnasio, y cualquier otro inconveniente que se presente.

Cuando se trabaja con un entrenador personal, este está permanentemente con su cliente, garantizando la adecuada ejecución de cada uno de los movimientos, vigilante ante cualquier señal de dificultad que presente la persona, para de esta forma asegurarse que todo este acorde a lo planificado, además esta estimulándole a la continuidad de los programas. Un entrenador personal es más que alguien que te dice que hacer, es un compañero que te ayuda en todo los momentos de la ejecución.
En resumen, si usted quiere lograr sus objetivos, a la hora de realizar sus ejercicios físico, lo ideal es solicitarle los servicios a un entrenador personal, calificado y cualificado, con los conocimientos necesarios para planificarle un plan de ejercicios acorde a sus requerimientos y objetivos.

El ejercicio ayuda a los hombres que luchan contra la diabetes y la apnea del sueñoSegún un estudio, el bajo nivel de condición física se relaciona co

Según un estudio, el bajo nivel de condición física se relaciona con mayor riesgo de muerte entre los hombres con ambas afecciones
Dirección de esta página: http://www.nlm.nih.gov/medlineplus/spanish/news/fullstory_112934.html (*estas noticias no estarán disponibles después del 09/05/2011)

Mary Elizabeth Dallas
Traducido del inglés: martes, 7 de junio, 2011 HealthDay Logo
Imagen de noticias HealthDay

Temas relacionados en MedlinePlus

* Apnea del sueño
* Diabetes
* Ejercicio y estado físico

LUNES, 6 de junio (HealthDay News/HolaDoctor) Según un estudio reciente, los hombres que tienen diabetes tipo 2, además de apnea obstructiva del sueño, parecen beneficiarse con un régimen de ejercicio periódico.

Los investigadores hallaron que una mayor resistencia producto de la actividad física constante puede aumentar significativamente las tasas de sobrevivencia para los hombres con ambas afecciones. Los autores del estudio apuntaron que los hallazgos son importantes debido a que está en aumento la prevalencia de la apnea del sueño, que comúnmente se presenta en las personas con diabetes y presión arterial alta.

"Los hallazgos recientes sugieren que los pacientes con apnea del sueño tienen mayor riesgo de morir por cualquier causa, en comparación con los individuos que no padecen esta afección", dijo en un comunicado de prensa de la Endocrine Society la coautora del estudio, la Dr. Skikha Khosla, endocrinóloga de Washington, D.C. Veterans Affairs Medical Center y George Washington University.

La buena capacidad de ejercicio ya se ha relacionado con un riesgo más bajo de muerte en los pacientes con diabetes tipo 2, agregó Khosla. El estudio reciente, previsto a presentarse el lunes durante la reunión anual de la Endocrine Society en Boston, halló que hay una relación similar en los hombres que además tienen apnea obstructiva del sueño, un trastorno que interrumpe la respiración durante el sueño.

Para el estudio, los investigadores analizaron a 567 hombres veteranos cuya edad promedio era de 62 años y quienes habían completado pruebas de esfuerzo físico entre 1996 y 2010. Los niveles de condición física de los hombres se basaban en la cantidad máxima de equivalentes metabólicos (metabolic equivalents, MET) que alcanzaban durante una prueba de esfuerzo (una prueba que determina qué tan bien responde el corazón ante el esfuerzo). A los hombres que obtuvieron 5 o menos MET se les clasificó dentro de condición física baja. Aquellos con más de 10 MET se consideró que tenían una condición física alta, y a cualquiera entre ambos valores se le atribuyó una condición física moderada.

Luego de tomar en cuenta otros factores de riesgo, como la raza, el hábito de fumar y el uso de medicamentos, los investigadores hallaron que el riesgo de muerte entre los hombres era 13 por ciento más bajo por cada aumento de un MET en el nivel de condición física. Además, los hombres en la categoría de baja condición física tenían un riesgo de muerte 75 por ciento más alto que aquellos considerados con alta condición física.

"Aunque estos datos son epidemiológicos y nuestra población de pacientes fue pequeña, la tendencia que observamos en la mortalidad es impresionante", comentó Khosla. Agregó, sin embargo, que se necesitan más estudios para confirmar los resultados.

Aunque las personas con apnea del sueño deben esforzarse por hacer entre 150 y 200 minutos de actividad física a la semana, deben hablar con su médico antes de empezar cualquier programa de ejercicio y trabajar gradualmente para alcanzar esa meta, recomendó Khosla.

Debido a que este estudio fue presentado en una reunión médica, los datos y las conclusiones deben considerarse preliminares mientras no se publiquen en una revista arbitrada.

Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare

FUENTE: Comunicado de prensa del 6 de junio de 2011 de la Endocrine Society.
HealthDay

domingo, 26 de junio de 2011

Asocian la obesidad y la falta de ejercicio con el dolor crónico

Traducido del inglés: miércoles, 22 de junio, 2011

Por Eric Schultz

NUEVA YORK (Reuters Health) - Las personas que hacen ejercicio por lo menos una hora por semana tienen menor riesgo que el resto de padecer dolor en la espalda, el cuello y los hombros.

Esto refuerza la posibilidad de que la obesidad y el sedentarismo influyan en el riesgo de desarrollar dolor crónico en esos sitios, opinó el coautor de un nuevo estudio, doctor Paul Mork, de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología.

El equipo de Mork siguió a más de 30.000 adultos participantes de un estudio de Noruega. Les midió el índice de masa corporal (IMC) al inicio del estudio y con qué frecuencia hacían ejercicio. Los participantes fueron seguidos por 11 años.

Los autores dividieron a los sujetos en cuatro categorías según el nivel de ejercicio y en otras cuatro, según el IMC. Registraron también cuántos de cada grupo desarrollaban dolor crónico de cuello, hombros y espalda baja.

Uno de cada 10 participantes tuvo dolor en la espalda baja y casi dos de cada 10, en el cuello o los hombros, tras considerar la edad, el IMC, el tabaquismo y si hacían trabajos manuales.

Los hombres que ejercitaban dos horas o más por semana al inicio del estudio eran un 25 por ciento menos propensos a tener dolor en la espalda baja 11 años después y un 20 por ciento menos propensos a sentir dolor de cuello u hombros, a diferencia de los sedentarios.

Y las mujeres que ejercitaban por lo menos dos horas por semana eran un 8 por ciento menos propensas a tener dolor de espalda baja que las sedentarias y un 9 por ciento menos proclives a tener dolor de cuello y hombros.

El peso también influyó en la aparición del dolor crónico.

Los varones obesos eran casi un 21 por ciento más propensos a desarrollar dolor crónico en la espalda baja que los hombres con peso normal, y un 22 por ciento más proclives a tener dolor de hombro o cuello.

Las obesas eran un 21 por ciento más propensas a desarrollar dolor en la espalda baja que aquellas con peso normal, y tenían un 19 por ciento más riesgo de tener dolor de hombro o cuello.

Mork está convencido de que aun el ejercicio moderado (una hora o más por semana) "puede, de algún modo, compensar el efecto adverso del sobrepeso y la obesidad en el riesgo futuro de desarrollar dolor crónico".

"El dolor crónico de cuello y espalda es importante para la salud pública porque influye en la calidad de vida, la discapacidad y el uso de los recursos de salud", indicó el doctor Adam Goode, fisioterapeuta de la Duke University, en Carolina del Norte, que no participó del estudio.

A mediados de la década de 1990, un estudio de Holanda estimó que el dolor de espalda baja le costaba a ese país casi el 2 por ciento de su producto interno bruto (PIB).

Ahora, el equipo de Mork escribe que "una pequeña reducción de la incidencia del dolor crónico de espalda baja tiene un impacto económico enorme".

FUENTE: online 11 de junio del 2011

Reuters Health

miércoles, 15 de junio de 2011

Ejercicio alivia síntomas en mujeres con ansiedad generalizada

Traducido del inglés: lunes, 13 de junio, 2011

Por Anne Harding

NUEVA YORK (Reuters Health) - Una programa de ejercicio de seis semanas alivia los síntomas del desorden de ansiedad generalizada (DAG), según el primer estudio randomizado para determinar si la actividad física ayuda a las personas con ese trastorno.

"Los resultados sugieren que el ejercicio es una opción terapéutica de corto plazo viable, segura y bien tolerada, una terapia potencialmente adyuvante en personas con DAG", dijo el doctor Matthew P. Herring, de la University of South Carolina en Columbus. "Hay que seguir investigando", añadió.

Herring presentó los resultados en Denver, durante la reunión anual del Colegio Estadounidense de Medicina del Deporte.

"El DAG es hoy, quizás, el trastorno de ansiedad que más comorbilidades produce, en especial en los pacientes de atención primaria", declaró el autor.

"Los tratamientos, incluida la farmacoterapia y las terapias conductuales, tienen resultados limitados y con complicaciones, como el gasto o los efectos adversos", agregó.

El equipo de Herring dividió al azar a 30 mujeres sedentarias con DAG y sólo bajo tratamiento farmacológico en tres grupos: dos hicieron actividad física y el otro formó una lista de espera (control).

El grupo entrenado con ejercicios de resistencia realizó dos sesiones semanales del tren inferior con pesas durante seis semanas. Comenzó a la mitad de su capacidad máxima y aumentó un 5 por ciento por semana.

Las mujeres del grupo entrenado con ejercicios aeróbicos hicieron bicicleta dos veces por semana para ejercitar la misma zona corporal durante 16 minutos de manera continua, también por seis semanas.

Un grupo de médicos que desconocía el ejercicio que hacía cada mujer evaluó el diagnóstico de DAG con la Escala de Trastornos de Ansiedad entre uno y 16 días después de la intervención.

El equipo evaluó también los síntomas al inicio del estudio y a las dos, cuatro y seis semanas de la intervención con el Cuestionario de Preocupaciones del Estado de Pensilvania.

El 60 por ciento de las mujeres del grupo tratado con ejercicios de resistencia, el 40 por ciento del grupo tratado con actividad aeróbica y el 30 por ciento del grupo en lista de espera tuvieron una remisión del DAG.

Los síntomas de preocupación a las seis semanas eran significativamente más bajos en los grupos entrenados que en el grupo control.

Mientras que las diferencias entre los resultados del entrenamiento de resistencia y aeróbico no fueron estadísticamente significativas, Herring sugirió que si los efectos eran realmente superiores con los ejercicios de resistencia, podría ser porque las participantes los percibían como más intensos.

El equipo está buscando fondos para realizar estudios más grandes.

"Existe la necesidad de explorar los efectos del entrenamiento físico en otros problemas asociados con el DAG, incluida la disminución de la atención y la desregulación emocional", indicó Herring.

Reuters Health

martes, 24 de mayo de 2011

El Engaño de las Bebidas Energéticas - ¿Realmente te Ayudan, o sólo Hacen Aumentar la Grasa Abdominal?


por Mike Geary, Entrenador Personal Certificado, Especialista Certificado en Nutrición

Hoy voy a despotricar un poco sobre las bebidas energéticas...

He recibido un montón de preguntas sobre todas estas nuevas bebidas "energéticas" que han salido al mercado durante los últimos años. Parecen estar de moda, especialmente con los jóvenes, y te prometen el mundo con afirmaciones escandalosas de la súper energía que vas a tener, y cómo vas a ser el mejor atleta del mundo y a empezar a levantar coches por encima de tu cabeza, y tener un cuerpo perfecto.

Entonces, surgen un par de preguntas:

¿Son estas bebidas "energéticas" realmente buenas para ti?
¿De verdad aumentan tu energía?
¿Realmente tienen algún tipo de fórmula mágica para darte energía?
¿Te ayudarán a adelgazar?

En primer lugar, echemos un vistazo a los ingredientes con los que generalmente se hace la mayoría de estas bebidas energéticas. Casi todas son simplemente engordantes aguas gaseosas cargadas de jarabe de maíz de alta fructosa (u otros azúcares añadidos), cafeína, taurina, un aminoácido, y algunas vitaminas añadidas para engañarte haciéndote creer que hay algo saludable en estos brebajes.

Empecemos con el jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF). Bueno, aquí tenemos calorías vacías que irán directamente a la grasa de tu abdomen, y que posiblemente sean aún peores para ti que el azúcar refinado (aunque eso es tema de debate, pero de semántica en el panorama general). Algunas bebidas energéticas utilizan otros azúcares añadidos en lugar del JMAF, pero en realidad no importa, porque son todas calorías vacías engordantes sin ningún beneficio nutricional.

Ok, entonces me dirás que hay variedades de bajo contenido de azúcar o sin azúcar como una alternativa a las bebidas energéticas llenas de JMAF. Sí, pero ahora tienes el problema de las sustancias químicas perjudiciales en los endulzantes artificiales que tienen sus propios peligros para la salud.

Otro problema con los edulcorantes artificiales es que hay algunos investigadores que creen que el uso de edulcorante artificial lleva a la gente a consumir más calorías sin darse cuenta y a ganar más peso en el largo plazo. No voy a entrar en detalles sobre eso, debido a que se prestaría a un debate completo por sí mismo. Sólo confía en mí que los edulcorantes artificiales y los productos químicos artificiales en los alimentos en general, ¡son todas malas noticias para el cuerpo! Nunca es una buena idea tratar de "engañar" a tu cuerpo con sabores artificiales.

¿Qué hay acerca de la cafeína?

Bueno, en primer lugar, la cafeína de por sí no da "energía". Técnicamente, la única sustancia que en realidad proporciona energía son las calorías (a partir de carbohidratos, proteínas y grasas).

Sin embargo, la cafeína puede ser una ayuda para despabilar o despertar a algunas personas, por medio de la estimulación del sistema nervioso central.
En lugar de tomar cafeína añadida a algún refresco "energético", prefiero que mi cafeína provenga de una fuente natural como el té verde, negro u oolong (o mi nuevo favorito - té de yerba mate), ¡que también proveen potentes antioxidantes saludables!

Ten en cuenta, sin embargo, que si tomas café con regularidad, es probable que tengas un cierto nivel de adicción a la cafeína y posiblemente no recibirías muchos beneficios de la cafeína en una bebida energética, de todos modos.

Consejo: trata de tomar más té y reducir tu consumo de café a sólo un par de días por semana máximo para disminuir tu dependencia de la cafeína. La mayoría de los tés contienen mucha menos cafeína que el café, y algunos (como el verde, blanco y oolong) contienen fitoquímicos sinérgicos que trabajan para reducir la respuesta de la cafeína que contienen. Esto significa que usted obtiene una respuesta más suave de la cafeína en el té verde, oolong, o blanco encomparación con la respuesta más fuerte que algunas personas reciben del café.

Ahora ¿qué pasa que la seudo mágica mezcla de taurina y vitaminas B que meten en estas bebidas energéticas?

Bueno, gran cosa... obtienes taurina de casi cualquier fuente de proteínas. Y la gran mayoría de las vitaminas B artificialmente añadidas simplemente se echan al inodoro en tu orina. Es mejor obtener las vitaminas de forma natural de una fuente de alimento REAL, no añadidas artificialmente a alguna bebida carbonatada. Tu cuerpo simplemente no utiliza fuentes falsas de vitaminas tan fácilmente como las naturales de la comida real.

Entonces, como puedes ver, en mi opinión, ¡les doy a todas estas bebidas energéticas un gran VOTO EN CONTRA! No caigas en la ridícula comercialización de todas estas seudo "bebidas energéticas".

En cambio, te doy la receta de mi propia bebida energética casera:

1. Haz una mezcla de té helado con té verde, té blanco y yerba mate. Me gusta añadir un poco de sabor a fruta, así que también uso una bolsa de té de frambuesa o arándanos o hibisco, y luego uso 2-3 bolistas de té verde y / o de té blanco, y 2-3 bolsas de yerba mate, y hago más de tres litros de té helado. Sólo uso una pequeña cantidad de stevia para endulzar ligeramente el té.

2. Compro agua de coco orgánico en una tienda de alimentos saludables, o compro cocos frescos para obtener el agua de coco.

3. Para mi bebida energética saludable, mezclo la mitad de un vaso con la mezcla de té helado y lleno el resto del vaso con el agua de coco.

Esta es realmente una bebida energética verdaderamente deliciosa y saludable, en lugar de las bebidas energéticas cargadas de productos químicos que todo el mundo está comprando engañado ahora.

Los tés verde, blanco y yerba mate contienen una pequeña dosis de cafeína junto con una variada mezcla de poderosos antioxidantes y fitoquímicos sinérgicos. Además, el agua de coco es una rica fuente de electrolitos y de diferentes vitaminas y minerales. Se sabe que el agua de coco es una buena fuente de energía instantánea, y también contiene algunos triglicéridos de cadena media, grasas saludables fáciles de utilizar para energía, y también ayuda al sistema inmunológico.

Disfruta de esta saludable bebida energética natural, sabiendo que le estás haciendo bien a tu cuerpo en lugar de llenarlo de productos químicos de las bebidas energéticas compradas.

Como siempre, reenvía libremente el enlace a tus amigos y familiares o compártelo en tus blogs, foros o páginas de Facebook para ayudar a tus amigos a vivir más sanamente.

domingo, 8 de mayo de 2011

Rodilla del Saltador (Tendinitis Rotuliana)


La rodilla de saltador, también conocida como tendinitis rotuliana o tendinopatía rotuliana, es una inflamación o lesión del tendón rotuliano, un tejido similar a una cuerda que une la rótula a la tibia (hueso de la espinilla). La rodilla de saltador es una lesión por sobrecarga (movimientos repetidos que causan irritación o daño en los tejidos en determinada zona del cuerpo).

Saltar, caer y cambiar de dirección de manera constante pueden provocar torceduras, desgarros y daño en el tendón rotuliano. Por lo tanto, los niños que regularmente practican deportes que implican saltar mucho todo el tiempo, como atletismo (en particular, salto en alto), baloncesto, voleibol, gimnasia, jogging y fútbol, pueden ejercer mucha presión en las rodillas.

La rodilla de saltador puede parecer una lesión menor que no es realmente grave. Por este motivo, muchos atletas siguen entrenando y compitiendo, y suelen ignorar la lesión o intentan tratarla por su cuenta. Sin embargo, es importante saber que la rodilla de saltador es una afección grave que puede empeorar con el tiempo y, a la larga, requerir cirugía. La atención y el tratamiento médicos tempranos pueden ayudar a prevenir el daño continuo en la rodilla.

Funcionamiento de la rodilla
Para comprender cómo se produce la rodilla de saltador, es útil entender cómo funciona la rodilla. La rodilla, que es la articulación más grande del cuerpo, le da estabilidad a la pierna y permite flexionarla, girarla y enderezarla. Hay varias partes del cuerpo que interactúan para permitir que la rodilla funcione de manera adecuada:

Huesos como el fémur (hueso del muslo), la tibia (hueso de la espinilla) y la rótula le dan a la rodilla la fuerza necesaria para soportar el peso del cuerpo. Los huesos que se encuentran en la rodilla permiten flexionarla suavemente.
Los músculos les dan a los huesos el tirón necesario para flexionar, enderezar y sostener las articulaciones. Los músculos que están alrededor de la rodilla incluyen el cuádriceps (en la parte frontal del muslo) y los músculos de la corva (en la parte trasera del muslo). El cuádriceps ayuda a enderezar y extender la pierna, y los músculos de la corva ayudan a flexionar la rodilla.
Los tendones son fuertes bandas de tejido que conectan los músculos a los huesos. Los tendones de la parte frontal de la rodilla son el tendón del cuádriceps y el tendón rotuliano. El tendón del cuádriceps se conecta a la parte superior de la rótula y permite extender la pierna. El tendón rotuliano se conecta a la parte inferior de la rótula y se une a la parte superior de la tibia.
Los ligamentos, que son similares a los tendones, son fuertes bandas de tejido que conectan los huesos a otros huesos.
Al trabajar en conjunto, los huesos, los músculos, los tendones y los ligamentos permiten que la rodilla se mueva, se flexione, se enderece, proporcione la fuerza necesaria para saltar y estabilice la pierna al caer.

Acerca de la rodilla de saltador
Cuando se extiende la rodilla, el cuádriceps tira del tendón del cuádriceps, que a su vez tira de la rótula. Luego, la rótula tira del tendón rotuliano y la tibia, y permite que la rodilla se enderece. Al flexionar la rodilla, en cambio, los músculos de la corva tiran de la tibia, y esto hace que la rodilla se flexione.

En la rodilla de saltador, el tendón rotuliano está dañado. Dado que este tendón es fundamental para enderezar la rodilla, el daño en él hace que la rótula pierda el soporte o el sostén. Esto causa dolor y debilidad en la rodilla, y dificulta el enderezamiento de la pierna.



Síntomas
Algunos de los síntomas frecuentes de la rodilla de saltador son los siguientes:

dolor directamente sobre el tendón rotuliano (o, más específicamente, debajo de la rótula)
rigidez en la rodilla, en particular al saltar, arrodillarse, agacharse, sentarse o subir las escaleras
dolor al flexionar la rodilla
dolor en el cuádriceps
debilidad en la pierna o la pantorrilla
Algunos de los síntomas menos frecuentes son los siguientes:

problemas de equilibrio
aumento de la temperatura, sensibilidad excesiva o hinchazón alrededor de la parte inferior de la rodilla

Tratamiento
La rodilla de saltador primero se evalúa mediante un sistema de calificación que mide el grado de la lesión (las calificaciones van del 1 al 5; 1 significa dolor solo después de realizar una actividad intensa y 5 significa dolor constante todos los días e imposibilidad para realizar actividades deportivas).

Al examinar la rodilla, el médico o profesional médico le solicitará al paciente que corra, salte, se arrodille o se agache para determinar el nivel de dolor. Además, es posible que recomiende una radiografía o una imagen por resonancia magnética (IRM). Según el grado de la lesión, el tratamiento puede consistir solo en reposo y bolsas de hielo o incluso cirugía.

Para la rodilla de saltador leve a moderada, el tratamiento incluye:

Interrupción de las actividades o adaptación a un régimen de entrenamiento que reduzca en gran medida los saltos o los impactos.
Colocación de hielo en la rodilla para aliviar el dolor y la inflamación.
Uso de una banda o sostén para rodilla (que se denomina banda infrarrotuliana o banda Chopat) para ayudar a dar sostén a la rodilla y la rótula. La banda se usa por encima del tendón rotuliano, justo debajo de la rótula. Una banda o sostén para rodilla puede ayudar a minimizar el dolor y a aliviar la presión en el tendón rotuliano.
Elevación de la rodilla cuando el paciente sienta dolor (por ejemplo, colocando una almohada debajo de la pierna).
Medicamentos antiinflamatorios, como ibuprofeno, para minimizar el dolor y la hinchazón.
Masoterapia (masajes).
Ejercicios de mínimo impacto para ayudar a fortalecer la rodilla.
Programas de rehabilitación que incluyan fortalecimiento muscular, centrados en los grupos musculares que soportan el peso, como el cuádriceps y los músculos de la pantorrilla.
Inyecciones especializadas para desensibilizar las terminaciones nerviosas y reducir la inflamación.
En raras ocasiones, por ejemplo, cuando hay dolor persistente o el tendón rotuliano está gravemente dañado, la rodilla de saltador requiere cirugía. La cirugía incluye la extracción de la parte dañada del tendón rotuliano, la extracción del tejido inflamatorio de la zona inferior (o polo inferior) de la rótula o la realización de pequeños cortes en los costados del tendón rotuliano para aliviar la presión de la zona media.

Después de la cirugía, se debe seguir un programa de rehabilitación que incluye ejercicios de fortalecimiento y masajes por un período de varios meses a un año.
Recuperación
La recuperación de la rodilla de saltador puede llevar de unas semanas a varios meses. Lo ideal es no hacer deportes o actividades que puedan agravar la rodilla y empeorar las afecciones.

Sin embargo, la recuperación no implica que el paciente no pueda realizar ningún deporte ni ninguna actividad. Según el grado de la lesión, se pueden practicar deportes o actividades de bajo impacto (por ejemplo, nadar en lugar de correr). Su médico le informará qué deportes y actividades no están permitidos durante el proceso de curación.

Prevención de la rodilla de saltador
El factor más importante para la prevención de la rodilla de saltador es el estiramiento de los músculos. Un buen régimen de calentamiento que incluya el estiramiento del cuádriceps, los músculos de la corva y los de la pantorrilla puede ayudar a prevenir la rodilla de saltador. Siempre es conveniente estirar los músculos también después de los ejercicios.

Extraido del MedlinePlus